Dia 7. Meseta de Bolaven y bus nocturno a Vang Vieng

A las 8h nos recoge el tuk tuk en el hotel. Nos lleva agencia Miss Noy y dejamos mochilas. Pani nuestro conductor lleva un tuk tuk bastante amplio para 6 u 8 personas. Pero vamos solos. Hemos contratado una visita de un día entero a Bolaven Plateau, la meseta de Bolaven, reconocida por sus bellas catataras y plantaciones de café y té. Hacemos la ruta corta. Total 80km en tuk tuk. La visita incluye artesanía local, fundición de machetes, visita a factoria de café y tres cataratas espectaculares. A saber Tad Fane, Tad Yuang y Tad Champi. Naturaleza en estado puro. Justo lo que buscamos. Encima apenas hay turistas. Es solo para nuestros ojos. A lo sumo hemos visto 20 personas sumando los tres saltos de agua. Al comienzo de la ruta el chófer nos paró en unos puestos de artesanía hecha con fibra de bambú donde venden cestos, sombreros, esterillas, gallineros... Luego nos ha parado en una fundición de machetes. Guau! Nos hicieron demostración de fragua y fundición a martillazo limpio con música pop local de fondo. Algún obrero se arrancó a bailar. Risión total. Hacen de todo con el acero. Herramientas de labranza, machetes, hachuelas, cuchillos... (el afilador! se afilan cuchillos, navajas, tijeras, oiga!! ). 

Vamos al turrón. La primera catarata Tad Fane son dos saltos de agua paralelos y larguísimos. Casi 100m. (Verificar). Había un cable para hacer canopy (tirolina). Pero descartamos por caro y arriesgado (40$ persona). Tiene que ser un derroche de adrenalina total. A la salida nos encontramos con Santi, un hombre catalán que viaja en solo en su bici pero descendiendo el Mekong por el otro "lao", la margen derecha que está menos transitada. Es un aventurero total. Viene pedaleando desde Ubón (Laos). Alli lo dejó el tren que cogió en Bangkok (Tailandia) y ahora regresa en bicicleta de montaña río abajo.

La segunda catarata a 2km más adelante llamada Tad Gnuang o Yuang depende quien lo escriba es un salto de agua  de unos 50m (verificar) al que se puede bajar a su base. Por una escalera muy resbaladiza. Una lluvia fina te salpica. Es una pasada. Un par de templitos desde donde tomar buenas fotos. En la parte superior de la cascada, el río tiene unas pozas aptas para el baño. Nos damos un chapuzón refrescante. A la salida vemos de nuevo a Santi, ciclista catalán. El dice que viene de Tad Champi nuestro siguiente destino.

Antes del salto visitamos una tienda bar de café y té donde se puede visitar los campos de cultivo y la maquinaria de secado del té. El bar está ahora animado, acaba de llegar un autobus de turistas europeos. Poca cosa más.

De vuelta a Pakse paramos en Tad Champi. Para nosotros sin ninguna duda la mejor de las tres cataratas. Te puedes bañar, hacer fotos impresionantes y además atravesar la catarata justo detrás de la cortina de agua. Maravillosa experiencia. Se llega después de andar apenas dos minutos. De camino, varias mariposas de gran porte revolotean en un árbol y seguido una escalera de madera y bambú que te deja en la base. La catarata hace unos escalones en su caída. El agua cae con impetú formando un lago de unos 100m de diámetro  donde te puedes bañar como hizo María. Luego nos hemos metido dentro de la catatara por un camino. Jo! cómo cae el agua. Hicimos muchas fotos desde ahí dentro. 

Paramos para comer y celebrar la excursion. Probamos el café local, tiene sabor suave. Y de postre la fruta de la pasión o maracuyá, muy rica. El cielo amenaza lluvia. A las 15:15h regreso a Pakse. Nos damos una ducha en la agencia y nos vamos a cenar algo antes de tomar el bus nocturno a Vang Vieng. Hemos cenado en el jardín de una tratoria italiana. Un sitio muy agradable regentado por un toscano que lleva aqui ya seis años. Precio y trato europeo.
Esperando en la agencia nuestro bus nocturno se pone a diluviar. El primer día que vemos llover después de tanta calor días atrás. Un buen chaparrón.

Un tuk tuk nos lleva a la estación de autobuses, carga nuestras mochilas y subimos al modesto bus nocturno. El bus dispone de un tatami para dos personas ahí intentaremos dormir hasta llegar a Vientián, la capital (que no visitamos). Serán 11horas. Luego un minibus nos llevará a Vang Vieng durante 3 horas más de trayecto. Hora de llegada estimada 12.00h. El bus nocturno no tiene wifi pero sí enchufe para cargar móvil y cámara. Pues a dormir que hoy ya hemos disfrutado mucho. Sabadiee!

 Tad Fane

 Tad Yuang (Nguang)

Tad Champi

Tad Champi (por dentro)

Mariposas negras

Camarrojas y lisones laosianos son muy apreciados


Nuestra cama de bus nocturno a la capital de Laos. 

Comentarios

  1. Quino me gusta como escribes , gracias por compartir vuestro viaje. Os sigo con emoción y un poquito de envidia. Saludos a María. Pasadlo bien y seguir disfrutando. Yo os acompaño al otro lado del teclado. Un abrazo.

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